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5 consejos para cuidar tu caldera si vives en Madrid

Si vives en Madrid, sabes bien que el clima puede ser tan impredecible como extremo, desde inviernos fríos hasta veranos calurosos.

Mantener la caldera en perfecto estado es fundamental para asegurar que tu hogar permanezca cómodo y cálido en los meses más fríos, y funcional durante todo el año.

Entender cómo cuidar adecuadamente de tu caldera puede parecer complicado y algo reservado para los técnicos, pero es fundamental para evitar problemas cuando más necesitas calefacción o agua caliente.

Por eso, te traigo una guía simple que te facilitará este mantenimiento, todo ajustado a las características de nuestro clima en Madrid.

Utilizar recambios originales

Mantener tu caldera en buen estado es fundamental y usar recambios originales es clave para lograrlo.

Cuando necesites cambiar alguna pieza de tu caldera, elige siempre las originales, especialmente si tienes una caldera Baxi Roca.

Estas piezas están hechas específicamente para tu modelo de caldera, asegurando que todo funcione perfectamente y dure más tiempo.

Si necesitas recambios, en Aquagas tienen recambios para calderas Baxiroca Madrid. Así sabrás que estás comprando un producto original y de calidad.

Aunque las piezas no originales puedan parecer más baratas al principio, al final pueden salirte más caras. Esto se debe a que podrían no ajustarse bien y causar averías que necesitarán más reparaciones.

Utiliza recambios originales en tu caldera

Ajustar la presión adecuadamente

Una presión incorrecta, ya sea demasiado alta o demasiado baja, puede afectar seriamente el rendimiento de tu sistema de calefacción y acortar la vida útil de la caldera.

Es importante mantener la presión del agua dentro de los rangos recomendados por el fabricante. Generalmente, esto significa una presión entre 1 y 1,5 bares cuando la caldera está fría.

Si notas que la presión está por debajo o por encima de este rango, es necesario ajustarla. Puedes hacerlo fácilmente verificando el manómetro y ajustando la válvula de llenado en la caldera.

Si no estás seguro de cómo realizar este ajuste o si la presión fluctúa de manera constante, es aconsejable contactar con un técnico profesional.

Un ajuste incorrecto puede llevar a problemas como ruidos en los radiadores y una eficiencia reducida, por lo que mantener la presión adecuada no solo es importante para el rendimiento, sino también para la eficiencia energética de tu hogar.

Ajustar la presión de la caldera adecuadamente

Verificar el termostato y los controles

Verificar el termostato y los controles de tu caldera es fundamental para asegurar que tu sistema de calefacción funcione de manera eficiente y efectiva.

Un termostato bien calibrado garantiza que la temperatura en tu hogar se mantenga confortable sin gastar energía de más.

Si el termostato está desajustado, la caldera podría estar encendiéndose y apagándose más frecuentemente de lo necesario, lo cual no solo es ineficiente, sino que también incrementa el desgaste del equipo.

Es recomendable revisar el termostato y los controles al menos una vez al año. Asegúrate de que el termostato responda adecuadamente a los cambios de configuración y que mantenga la temperatura que has seleccionado.

Además, verifica que todos los controles estén funcionando correctamente y que no haya signos de desgaste o daño.

Si encuentras cualquier irregularidad durante la inspección o si el termostato no regula la temperatura de manera eficaz, puede ser necesario recalibrarlo o reemplazarlo.

Esta es una medida realmente simple pero que puede mejorar significativamente el rendimiento de tu caldera y ayudarte a controlar mejor el consumo de energía en tu hogar.

Verificar el termostato y los controles

Purgar los radiadores

Purgar los radiadores es un paso esencial en el mantenimiento de tu sistema de calefacción, especialmente antes de iniciar la temporada de frío en Madrid.

Con el tiempo, es normal que se acumule aire en el interior de los radiadores, lo cual puede impedir que el agua caliente circule eficazmente.

Esto resulta en radiadores que se calientan de forma irregular o que permanecen fríos en la parte superior mientras están calientes en la base, reduciendo la eficiencia de toda la calefacción del hogar.

Para purgar los radiadores, necesitas una llave de purga y un recipiente para recoger el agua que pueda salir.

Comienza con el radiador más cercano a la caldera y continúa con el resto, siguiendo el circuito de calefacción.

Abre lentamente la válvula de purga hasta que oigas que el aire comienza a salir y solo agua fluye del radiador.

Y una recomendación final: es importante hacerlo con el sistema de calefacción apagado para evitar quemaduras o accidentes.

Purgar los radiadores

Realizar revisiones periódicas

Realizar revisiones periódicas es esencial para asegurar el funcionamiento óptimo de tu caldera, especialmente durante los meses más fríos en Madrid.

Esta práctica no solo ayuda a prolongar la vida útil de la caldera, sino que también garantiza que funcione de manera eficiente, lo que se traduce en un ahorro significativo en tus facturas de gas.

La recomendación es que un técnico cualificado revise tu caldera al menos una vez al año. Durante estas inspecciones, el profesional puede detectar problemas menores antes de que se conviertan en fallos mayores, evitando así caras reparaciones.

Mi consejo es que optes por una empresa con reputación como Aquagas, que podrá realizar el mantenimiento necesario de cualquier caldera Baxi Madrid.

Además, una revisión regular asegura que la caldera cumpla con las normativas de seguridad vigentes, protegiendo a tu familia de riesgos asociados con fugas de gas o malas combustiones.

Tómate el tiempo para programar estas revisiones y no esperes a que aparezcan señales de mal funcionamiento.

Considera estas visitas como una inversión, no como un gasto, ya que están destinadas a mantener tu sistema de calefacción en las mejores condiciones posibles.

Realizar revisiones periódicas a la caldera

Mantener tu caldera en correcto estado no solo optimiza su funcionamiento y eficiencia, sino que también contribuye a tu seguridad y confort.

Dedicar tiempo a estos cuidados es invertir en la durabilidad de tu sistema de calefacción y en la calidad de vida en tu hogar, asegurando un invierno cálido y sin preocupaciones.

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